viernes, 18 de febrero de 2011

Diógenes

Mi marido acumula cosas: facturas, latas, frascos y cajas vacías, clavos, cables, revistas, botellas, aparatos rotos, etc. Pienso que sufre de Síndrome de Diógenes. Si seguimos guardando, dentro de un tiempo tendremos que cambiarnos de casa. Pobre él si yo me voy antes... pobres los vecinos que tendrán que aguantar el olor y los insectos, hasta los roedores. Por ahora está todo controlado porque la Cenicienta limpia, desodoriza y tira cosas sin que él se dé cuenta. Si acumulara dólares, ¡seríamos ricos!


No hay comentarios:

Publicar un comentario